En cuanto a la comparación de precios, sostuvo: «Para especificar, en mayo un aerosol blanco para pintar se vendía a $900, hoy su precio es de 1900. Tuvo un incremento de 111%; 1 kilo de clavos 2 ½ punta parís en mayo $1200, hoy $1950 con un 62.5% de incremento; el cartucho de silicona en mayo valía $1450 y hoy $2950 (99%); pegamento epoxi en mayo $1030 y hoy $2305».
Angiulli agregó que «no existe un aumento universal y parejo, sí notamos aumentos exponenciales, muy parecidos a los vividos en aquellas épocas en que se terminó en una hiperinflación».
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El sector perdió lamentablemente gran parte de su industria y hoy los productos son importados en un 60% y gran parte de los que sí se fabrican en el país, también tienen un complemento importado. La mayoría de los importadores ya no pueden tener divisas al precio oficial y recurren a importar con valores muchos más altos. A pesar de la recesión, la industria, la construcción y el hogar, siguen demandado mercadería, claro está que no al nivel que habíamos tenido hasta fines de junio. El sector ha sufrido una caída en las ventas del 8% desde la última devaluación que el gobierno implementó después de las paso.
«Hoy cada importador tiene el dólar que puede, la mayoría de ellos supera los $ 700 y a cada momento cambian la cotización«, expresó.
Por último, «los clientes comprenden a diferencia de otras épocas que los que componemos la cadena de valor no somos culpables de los constantes aumentos, pero se hace terriblemente tedioso la atención al público, por la demora que les ocasionamos a los consumidores finales, ya que tenemos que acceder un actual».
